18 de enero de 2014

Neil Gaiman: Coraline


Coraline
Autor: Neil Gaiman
Título original: Coraline
Género: Infantil - Horror - Fantasía
Año de publicación: 2002
Páginas: 158








Sinopsis
Al día siguiente de mudarse de casa, Coraline explora las catorce puertas de su nuevo hogar. Trece se pueden abrir con normalidad, pero la decimocuarta está cerrada y tapiada. Cuando por fín consigue abrirla, Coraline se encuentra con un pasadizo secreto que la conduce a otra casa tan parecida a la suya que resulta escalofriante.
Sin embargo, hay ciertas diferencias que llaman su atención: la comida es más rica, los juguetes son tan desconocidos como maravillosos y, sobre todo, hay otra madre y otro padre que quieren que Coraline se quede con ellos, se convierta en su hija y no se marche nunca. Pronto Coraline se da cuenta de que tras los espejos, hay otros niños que han caído en la trampa. Son como almas perdidas, y ahora ella es su única esperanza de salvación. Pero prar rescatarlos tendrá también que recuperar a sus verdaderos padres, y cumplir así el desafío que le permitirá volver a su vida anterior.


Opinión

Este es el primer libro que leo de Neil Gaiman. Por qué no lo hice antes, realmente no se.
Aunque técnicamente ya esté grande para estas historias, mi niña interna no se rinde y ya desde el vamos me enganché completamente con la historia. A las cinco páginas ya estaba enamorada del estilo, aunque no así de los dibujos que me resultaron feos y grotescos -pero no por eso mal hechos-, y yo personalmente no los hubiera puesto en un libro para chicos (aunque sí quizás en otro tipo de libro).

Uno de los tiernos dibujos del libro
La historia es tierna y oscura a la vez. Coraline es una niña que está de vacaciones y por lo tanto se muere de aburrimiento. Desde hace poco vive junto a sus padres en un caserón que está dividido en varias viviendas y tiene por vecinos a un amaestrador de ratones y a dos actrices retiradas con unos perros muy simpáticos.
Siguiendo una sugerencia de su madre, Coraline se pone a hacer un inventario de los objetos de la casa, y es así como su atención se fija en una puerta misteriosa del salón que al abrirse sólo da a una pared. Curiosa, Coraline no deja de pensar en esa puerta y es por eso que un día la abre sin que su madre lo sepa y encuentra que al otro lado ya no está la pared, sino que hay un pasillo que da... a su casa. O mejor dicho, una réplica exacta de su casa, de sus vecinos y hasta de sus padres, con la pequeña diferencia de que en este mundo paralelo las personas tienen botones en lugar de ojos y los animales hablan.

Todo parece más divertido y maravilloso en este otro mundo. Su Otro Padre quiere jugar con ella y su Otra Madre le hace las comidas más deliciosas. Coraline podría quedarse para siempre allí si así lo deseara. Sólo debe dejar que la Otra Madre le cosa botones en el lugar de sus ojos... y no prestar atención a ciertas cositas bastante escalofriantes que ocurren a su alrededor.

Este es del tipo de historia que se disfruta de chico y nuevamente de grande, porque se comprenden cosas que antes habían pasado desapercibidas y porque tienen esa dosis de inocencia que ya no se encuentra en las historias para no-niños. 
Calculo que el público al que apunta es de entre 10 y 13 años, aunque me costó decidirme entre si era juvenil o infantil. Tiene un tono, dulzura y un ritmo infantil pero luego hay repentinos diálogos complejos, o palabras en un diálogo que un niño promedio no conoce. Me llamó mucho la atención la expresión «el recuerdo de algo olvidado». Es, diría, una historia para niños inteligentes.

Es tenebroso en la medida justa, porque viéndolo con ojos de "adulto" (adulto al menos en teoría) se lee con una sonrisa de simpatía aquello que está pensado para ser escabrosito. Es por eso que en ciertos momentos me sorprendió mucho encontrar comentarios mucho más oscuros de lo que venía siendo el tono general. Cosas del estilo de «Pertenecemos a la oscuridad y a los lugares vacíos. La luz nos marchita y nos abrasa.».

Los personajes que deben ser queribles son muy lindos y los malos son realmente malos. En muy pocas palabras estamos al tanto de su forma de ser o de sus locuras. Coraline es una niña realmente inteligente y despierta, a quien -afortunadamente- no es fácil de engañar.
Quienes más personalidad tienen sin embargo son los animales, que hablan lo justo y necesario pero lo poco que dicen es muy contundente (como cierto perro de pocas pulgas que trabaja de acomodador en el teatro), sin perder por eso su escencia de animal doméstico.

Como hace varios años ví la película, ya tenía el estilo de los muñequitos muy metido en la cabeza y me imaginé toda la historia así. A veces me preguntaba cómo habría representado a los personajes de no ser por eso... y finalmente llegué a la conclusión de que, como me pasó con La mecánica del corazón, mi imagen mental habría sido algo similar a lo que se hizo, aunque quizás con una estética similar a las películas de Tim Burton.


Con este tipo de historias mi niña interna está feliz de la vida.



Calificación: 4/5
Muy bueno

6 comentarios:

  1. Yo tengo que ponerme con los libros de neil gaiman :D

    ResponderBorrar
  2. Tengo muchas ganas de leer al autor y este libro me llama desde hace tiempo.
    Besos

    ResponderBorrar
  3. Nunca he visto la pelicula ni he leido el libro, pero este sera el año :)
    Paso tambien a avisarte que te nomine en mi blog, besos y saludos.

    http://pages-of-dreams.blogspot.mx/2014/01/premio-liebster-award.html

    ResponderBorrar
  4. Me encanta este libro!!!
    Lo leí en un par de días, me gustó mucho la ambientación.
    La peli está bastante bien adaptada =)

    Besotes

    ResponderBorrar

ACLARACIÓN: Estás más que invitado/a a comentar en toda la extensión que quieras si tu opinión es distinta de la mía. Hay tantos gustos e interpretaciones como personas, y oir otros puntos de vista enriquece.
Lo NO se aceptarán son comentarios insultantes o con faltas de respeto, no hace falta agredir para estar en desacuerdo.